El negocio de la militarización en datos: cuánto aumentó con AMLO el presupuesto de las Fuerzas Armadas

Pese a que el presidente Andrés Manuel López Obrador había prometido regresar a los militares a los cuarteles, la Sedena, la Semar y la Guardia Nacional son las instituciones que más han visto un aumento en sus ingreso}

El proceso de la militarización, intensificado tras la “Guerra contra el narcotráfico” declarada por el presidente panista Felipe Calderón en 2006, se profundizó durante el sexenio priista de Enrique Peña Nieto (2012-2018) hasta acelerarse en el actual mandato del morenista Andrés Manuel López Obrador, en donde las Fuerzas Armadas tienen cada vez más presupuesto y poder.

Apenas la noche del miércoles 12 de octubre, tras una acalorada discusión, la Cámara de Diputados dio luz verde a la ampliación de la participación del Ejército en las calles para realizar tareas de seguridad pública hasta el 2028 y no hasta el 2024, una reforma constitucional promovida por el propio Presidente, quien durante su campaña había prometido regresar a los militares a los cuarteles.

Tras horas de debates, la reforma constitucional fue aprobada a la medianoche con 339 votos a favor, 154 en contra y dos abstenciones, impulsada principalmente por el partido oficialista Morena, sus aliados y el Partido Revolucionario Institucional (PRI), éste último tras distanciarse del bloque opositor.

Avalado ya por el Senado, el dictamen ahora deberá ser aprobado por los congresos estatales, en donde se prevé que pase sin mayores complicaciones, para ser turnada al Ejecutivo y finalmente sea publicado en el Diario Oficial de la Federación, entrando en vigor.

El aumento de poder de los militares durante el actual gobierno también se ha visto reflejado en la Guardia Nacional, un cuerpo de 115 mil efectivos creado en el 2019 por López Obrador para reemplazar a la Policía Federal, corporación que AMLO ha tachado de ser “violadora de derechos humanos, podrida, y formar a funcionarios corruptos y deshonestos”.

Originalmente con mando civil y bajo el dominio de la Secretaría de Seguridad Pública Ciudadana (SSPC), el pasado 7 de octubre la Guardia Nacional fue autorizada a quedar bajo el mando de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) tras la aprobación en las Cámaras de un dictamen que modifica cuatro leyes de seguridad.

Dicho aval se dio pese a señalamientos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Amnistía Internacional y otras organizaciones que alertaron que esta decisión abre la puerta a una militarización más profunda en el país.

De acuerdo con el Inventario Nacional de lo Militarizado, que fue realizado por el Programa de Drogas del Centro de Investigación y Docencia Económicas Región Centro (CIDEPPD) y México Unido Contra la Delincuencia (MUCD), en los últimos 12 años alrededor de 227 funciones civiles han sido asumidas por las Fuerzas Armadas, entre ellas el patrullar las calles, vigilar las aduanas, aplicar vacunas, construir las obras emblemas del gobierno y hasta limpiar sargazo.