En caso Colosio, FGR determina no ejercer acción penal por presunta tortura a Mario Aburto

La FGR concluyó que no hay elementos que acreditaran tortura a Mario Aburto, asesino confeso de Colosio.

La resolvió el no ejercicio en definitiva de la acción penal en las investigaciones por supuestos casos de tortura en contra de, asesino confeso del excandidato presidencial 

Este lunes, en listas judiciales, la jueza Segundo de Distrito De Amparo en Materia Penal, Paloma Xiomara González, notificó que la autoridad responsable informó que ha sido autorizada la consulta de no ejercicio de la acción penal de la averiguación previa relacionada.

De esta forma, la autoridad judicial estableció un plazo de tres días para que el sentenciado a 50 años de prisión y su defensa expresen lo que a su derecho convenga.

El pasado 15 de febrero, la jueza González había notificado de un plazo de tres días, a la FGR, para que le notificara si se había autorizado en definitiva enl no ejercicio de su acción penal.

El titular de la Fiscalía del caso Colosio, Abel Galván Gallardo, planteó el no ejercicio de la acción penal en la indagatoria 2080/94, al no encontrarse elementos que acreditaran la tortura, el pasado 21 de noviembre del año pasado, por lo que Aburto Martínez presentó un recurso de inconformidad.

El magnicida obtuvo un amparo el año pasado en el que se ordenó al titular de la FGR, Alejando Gertz Manero, “coordinar y supervisar la actuación de las Fiscalías Especializada en Materia de Derechos Humanos y Especial en Investigación del Delito de Tortura, que se encuentran a su cargo, para que con la debida diligencia, profesionalismo, eficacia y eficiencia”, se integrara y se determinara la carpeta de investigación.

En su denuncia por tortura, Aburto Martínez involucró a funcionarios de la entonces Procuraduría General de la República (FGR), entre ello su titular, Diego Valadés; al exgobernador de Sonora, Manlio Fabio Beltrones, y al expresidente Carlos Salinas.

El entonces juez Segundo de Distrito de Amparo en Materia Penal en la Ciudad de México, Antonio González García, había resuelto que en 1994 no se integró debidamente la averiguación y de dilataron las investigaciones.

Agregó que fue hasta 2022, que la FGR integró un equipo especial de investigación y litigación responsable de investigar, perseguir los delitos y, en su caso, retomar y concluir los procesos penales vinculados al asesinato de Colosio, el 24 de marzo de 1994, en Lomas Taurinas, Tijuana.

Aburto cumple su sentencia de 50 años de prisión, por ser penalmente responsable de homicidio calificado con premeditación y alevosía, y por portación de arma de fuego sin licencia, en el Centro Federal de Readaptación Social 12, en Guanajuato.