La Evaluación Nacional de Amenaza de Drogas de 2024 reveló una razón por la que el famoso narcotraficante de México podría perder su facción
En mayo, la Administración de Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos, publicó la Evaluación Nacional de Amenaza de Drogas (NDTA) de 2024. En el informe, en el que la agencia muestra las tendencias de narcotráfico que ponen en peligro a la nación, revelaron por qué el liderazgo en el cartel de Sinaloa, de “El Mayo Zambada” podría estar en duda.
De acuerdo con el reporte, el cartel de Sinaloa es una de las organizaciones criminales más antiguas de México y uno de los “más violentos y prolíficos del mundo”. Dirigen el contrabando de fentanilo y otras sustancias ilícitas a Estados Unidos, a través de personas, conocidas como “mulas”.
Quién es el jefe del cartel de Sinaloa
La DEA señala que el cartel de Sinaloa no tiene un líder, y está formado por cuatro organizaciones criminales que comparten recursos, como: rutas de contrabando, contactos corruptos, acceso a proveedores de sustancias químicas ilícitas y redes de lavado de dinero. Sin embargo, advierte que no distribuyen sus ganancias ni tienen que responder a una cadena de mando principal.
La agencia también hace referencia a las luchas internas por el poder y las “alianzas fluctuantes” que dejan en duda la viabilidad del modelo por el que se manejan, denominado “paraguas”. Las cuatro organizaciones están dirigidas por:
- “Los Chapitos”: nombre colectivo de Iván Guzmán-Salazar, Alfredo Guzmán-Salazar, Joaquín Guzmán-López y Ovidio Guzmán-López, quienes son hijos de Joaquín “El Chapo” Guzmán-Loera.
- Ismael “El Mayo” Zambada-García: que fue codirector del cartel de Sinaloa durante más de tres décadas.
- Aureliano “El Guano” Guzmán-Loera: hermano de Joaquín “El Chapo” Guzmán-Loera.
- Rafael Caro-Quintero: considerado uno de los narcotraficantes más famosos de México.
También se sabe que el cartel de Sinaloa ha construido una asociación rentable con proveedores de precursores químicos con sede en China, para obtener los ingredientes que necesitan para fabricar drogas sintéticas, y con organizaciones de aquella nación de lavado de dinero, conocidas como MLO, para devolver las ganancias “limpias” de las drogas hasta México.
Por qué el liderazgo de “El Mayo Zambada” está en duda
Según la evaluación de la DEA, “Los Chapitos” están en el centro de una batalla interna contra el exsocio de su padre, Ismael Zambada-García, apodado “El Mayo”, quien ha estado involucrado en el tráfico de drogas desde México desde la década de 1970 y ha codirigido el cartel de Sinaloa durante más de 30 años. Sin embargo, los informes de la agencia, encontraron que actualmente, “El Mayo Zambada” de 76 años, se encuentra en mal estado de salud física, “lo que deja en duda el liderazgo de su facción”, explican.
Una ficha de la Administración de Control de Drogas, publicada en línea, muestra que se ofrece una recompensa de 15 millones de dólares por información del narcotraficante y que es considerado “peligroso”. Además, que está acusado en Estados Unidos de: violaciones federales de drogas; conspiración para poseer una sustancia controlada, más de cinco kilogramos de cocaína y más de 1000 kilogramos de marihuana; conspiración para importar una sustancia controlada y para poseer armas de fuego para promover delitos de tráfico de sustancias ilícitas; entre varios otros.
¿Quién podría quedarse con el liderazgo del cartel de Sinaloa?
“Los Chapitos”, hijos de “El Chapo” Guzmán, quien actualmente cumple cadena perpetua en una prisión estadounidense, continúan con sus actividades, pese a que Ovidio Guzmán-López, uno de sus líderes, fue arrestado por las autoridades mexicanas y extraditado a Estados Unidos en septiembre de 2023.
Por su parte, Rafael Caro-Quintero, que fue uno de los fundadores del Cartel de Guadalajara original, fue sentenciado en México a 40 años de prisión, pero puesto en libertad en agosto de 2013 después de cumplir 28 años de su condena. Ese mismo mes, el gobierno de México emitió una orden para su nuevo arresto, y finalmente fue recapturado en julio de 2022.
La DEA precisa que desde la recaptura de Caro-Quintero, “Los Chapitos” han luchado contra su organización, conocida como el Cartel de Caborca, por el control de la región del desierto de Sonora, un estado en el noroeste del país, con una ruta de tráfico crucial por la frontera con Arizona.