Alan Yasser López abandona a los jóvenes Sinaloenses

POR: JORGE ARAGÓN

 

Como una auténtica figura decorativa es visto Alan Yasser López en el Instituto Sinaloense de la Juventud, pues la labor que realiza ha sido desviada y solamente favorece a sus amigos más íntimos o cercanos, dejando en el olvido a quienes realmente necesitan de una mano benefactora.

Como muestra palpable de ello, ahí están decenas y decenas de menores de edad que han tomado transitados cruceros en la ciudad de Los Mochis trabajando como “limpiavidrios” u ofreciendo mercancía diversa a los automovilistas, con el fin de ayudar en la manutención de sus hogares.

Sin embargo, lo más lamentable y que Alan Yasser López no alcanza a comprender, es que por la falta de apoyos reales, estos niños y en ocasiones hasta niñas, están perdiendo la oportunidad de estudiar, pues la pobreza que lacera sus hogares impide a sus padres mantenerlos en alguna institución educativa.

Ante tan adversas circunstancias, dejan las aulas y se van a la calle a buscar el sustento para ayudar con un bocado a los demás miembros de la familia.

Por eso muchos se preguntan dónde se encuentra el “flamante” director del Instituto Sinaloense de la Juventud, que anda más preocupado por quedar bien con sus amigochos que en darle solución a esta grave problemática de la sociedad.

Los únicos apoyos los otorga a sus amigos cercanos, con becas de transporte, desatendiendo a los jóvenes de la calle que no tienen oportunidad de estudiar ni acceso a las becas para tal efecto.

Un caso muy palpable se observa todos los días en el cruce de los bulevares Macario Gaxiola y Rosendo G. Castro, donde José Alfredo, un chamaco, expone su vida brincando a los cofres de los vehículos para limpiar los parabrisas