‘Pactó impunidad Malova con Quirino’
El Gobernador ha eludido informar el manejo de la Hacienda pública por parte de los funcionarios malovistas; ‘aquí hay pendientes de la administración que sale’ y hay que ‘fincar responsabilidades’, demanda el Doctor en Ciencias Políticas Ernesto Hernández Norzagaray
El Gobernador Quirino Ordaz Coppel concedió un pacto de impunidad a su antecesor Mario López Valdez, considera Ernesto Hernández Norzagaray.
A diferencia de Javier Corral, en Chihuahua; o Jaime Rodríguez, “El Bronco”, en Nuevo León, quienes exhibieron los actos de corrupción que hicieron los gobernadores anteriores, Ordaz Coppel ha evadido informar sobre las irregularidades cometidas con el manejo del erario durante la administración malovista, compara el politólogo.
“Desde el punto de vista mediático, el Gobernador procura deslindarse del estilo de gobernar de Malova, lo ha hecho”, describe.
“Sin embargo, hay una situación que a mí me parece muy importante, que destaca, que si realmente quiere hacer contraste, debería, en un contexto de crisis como se viene, tratar de ajustar cuentas con el Gobierno anterior”, dice.
“Y aquí yo observo que puede haber ya un acuerdo de impunidad en (los asuntos) que corresponden al Estado”, señala.
Para Hernández Norzagaray, el pacto de impunidad fue el pago de la deuda que tenía el mazatleco con el mochitense, cuando éste último siendo Gobernador apoyó su candidatura para sucederlo en el poder.
Deshacer la alianza PAN-PAS
“Hay una deuda política, vamos a decirlo, finalmente el (ex) Gobernador (Malova) lo apoyó para que llegara, hay que recordar sobre todo para que la alianza PAN-PAS no fructificara porque, si hubiera caminado, seguramente no hubiera ganado”, analiza.
– ¿Es una retribución a esos favores?
Siento como que, diciendo, yo tengo una deuda pendiente, entonces mi pago es no perseguir a nadie. Y que esto se vaya a la deuda acumulada.
‘El que la hace, la paga’
En su campaña a la Gubernatura en 2010, López Valdez acusó de corrupción a funcionarios ligados al ex Gobernador Jesús Aguilar Padilla y prometió castigos. Pero no los ejecutó, recuerda el Doctor en Ciencias Políticas y Sociología por la Universidad Complutense de Madrid.
“Malova habló de corrupción en el Gobierno de Aguilar Padilla, que iba a ir por ellos. ¿Y qué pasó? Pues nunca fue por ellos, no tenía interés en remover más allá de lo que se necesitaba en la etapa de las campañas”, recuerda.
“Creo que Quirino está haciendo lo mismo. El estilo en las formas (de gobernar) a lo mejor cambian, pero lo que es de fondo no cambia”, menciona.
“Y justo es lo que queremos los sinaloenses, que cambien las cosas y como se dice: ‘en democracia el que la hace, la paga’. Entonces, si el Gobernador saliente tiene pendientes, lo que debe hacer el Gobernador entrante es coadyuvar para que le restituyan, si es así, algo de lo que está sin saber dónde se destinó”, expone.
Y enuncia las anomalías que considera cometió la administración anterior.
“No puede ser que estén perdidos cientos de millones de pesos; que haya una deuda que rasca prácticamente los 9 mil millones de pesos; y que tenemos allá acreedores exigiendo pagos, ¡y que no pase nada!”, lamenta.
“Lo que dijo en el Congreso (del Estado) el (ex) Secretario de Obras Públicas, (José Sevilla) ¡es escandaloso!: el hecho de que las obras por cientos o quizás de miles de millones de pesos, se entregaron a base de telefonazos, es una denuncia…”, comenta.
“Ya como Gobernador electo, incluso en la toma de posesión, debió de haber dicho algo sobre esto, porque finalmente son las preguntas en la cabeza de muchos sinaloenses, ¿qué va a pasar con todo esto? Nos dejan un Estado quebrado, municipios quebrados financieramente, con serias limitaciones para poder invertir en obra pública, muchas veces con problemas de nómina. Yo creo que le está sacando la vuelta, me da la impresión, el Gobernador en estos temas. Y esto reclama un posicionamiento”, exige el también columnista de Noroeste y Sinembargo.mx.
– ¿Entonces, Malova negoció su salida?
Podría haber un entendido ahí, un entendido que se traduce en un cierto pacto de impunidad… Quirino nos debe todavía explicación sobre esos temas. Y va a dejar que se vayan esas cosas. Y no solamente ese tema, a mí por ejemplo, me preocupa el tema de la Universidad… de hecho, no ha tenido ningún posicionamiento respecto a la Universidad… tampoco le interesa.
Para el catedrático uaseño, la diferencia de un Gobernador a otro es su comportamiento frente a la corrupción, falta de transparencia, desvíos de recursos.
“Nos gustaría tener un Javier Corral en Sinaloa para que nos diga: ‘vamos a revisar lo que nos dejaron y fincar responsabilidad’…”, expresa.
Compromiso vacío
En su discurso, después de rendir protesta, Ordaz Coppel pidió la renuncia anticipada a cualquier funcionario que pensara en trabajar en el Gobierno para acumular riqueza.
“Esta declaración que los que venían a hacerse ricos que mejor le entregaran su renuncia antes de ser nombrados formalmente, yo creo que volvemos al tema de lo del vacío, de lo que tenía que decir”, expone.
“Eso es una buena manera de evadir lo sustantivo que era lo otro de decir: aquí hay pendientes de la administración que sale y vamos a tratar de corregirlos… y también de fincar responsabilidades del Gobierno saliente”, manifiesta.
Gabinete de personalidades
A diferencia del Gabinete que integró Malova, Ordaz Coppel incluyó a personalidades y profesionales, compara Hernández Norzagaray.
“Más que presentar un Gobierno de cuotas y cuates, ver un Gobierno profesional”, describe.
Aunque considera que es prematuro hacer análisis respecto al Gabinete, sí pronostica que aún falta conocer las “cuotas” que impondrán los grupos priistas que apoyaron la campaña del mazatleco, como Diva Hadamira Gastélum, Heriberto Galindo, Sergio Torres Félix y otros priistas más.
Quienes podrían colocar personas en las subsecretarías y direcciones, y así tener el control operativo de ciertas áreas del Gobierno del Estado.
“Los grupos que están atrás de los nuevos aspirantes al Gobierno del Estado, usted recordará a Diva, que no queda, pero seguramente tendrá su cuota; Heriberto Galindo, a Sergio Torres. Uno va bien, bueno, ¿qué les pasó a estos grupos?, ¿dónde queda su cuota dentro del Gobierno? Y quizá la respuesta la tendremos cuando se nombre a los subsecretarios, a los delegados, en fin, es la siguiente fotografía que nos debe el Gobierno del Estado”, dice.
Más que un político es un administrador
El politólogo es concluyente en la descripción de Quirino Ordaz.
“Mi sospecha es que vamos a tener como Gobernador, no a un político, vamos a tener un administrador de los recursos escasos que hay en el Estado”, señala.