Jesús Robles, el secretario técnico en el Ayuntamiento de Ahome, ¿por qué permanece inamovible?  

POR: JORGE ARAGÓN  

En su oficina se “legalizan” operaciones que implican millonarias sumas de dinero 

Han pasado más de dos décadas y un funcionario que permanece inamovible en su cargo es Jesús Robles Rivera, sin importar el color de los alcaldes que han desfilado por el Palacio Municipal.

Al interior y en las afueras del edificio sede de los poderes en Ahome es un secreto a voces que Robles Rivera cuenta con un gran poder y que si se decidiera a hablar, muchas sorpresas habría para la ciudadanía sobre las triquiñuelas que se tramaron en su cubículo.

Pero, dicen también, es el menos interesado en abrir la boca, ya que saldría seriamente “raspado”.

Como prueba un pequeño botón de muestra.

A finales de la administración pasada se hizo pública la siguiente noticia:

 

“Corrupción y tráfico de influencias podría haber detrás de los vehículos que se resguardan en la pensión municipal de Ahome, luego de que salieran a relucir denuncias donde reclaman unidades que compraron y no han sido entregados.

“Uno de los casos denunciados es por Aidé Soto Martínez, quien expuso que ella junto a sus representados por la falta de vivienda, negociaron la compra de 7 vehículos de la pensión con un valor de 6 mil pesos cada uno, así como una motocicleta en 2 mil 500 pesos y que en total pagaron 44 mil 500 pesos, sin embargo, no se los han entregado.

“La gestora, acusó al secretario técnico del Ayuntamiento, Jesús Robles Rivera, quien depende del Secretario del Ayuntamiento y del Alcalde Arturo Duarte García, de “solapar” a su hermano, y que en conjunto, les han dado largas para la entrega de dichos carros, mismos que se vendieron en común acuerdo”.

Así como este señalamiento de corrupción, existe la seguridad de que existen muchísimos casos más, de mayor o menor cuantía y que involucran con seguridad a funcionarios de diversas dependencias del ayuntamiento ahomense.

Lo que piensa la gente es que posiblemente Jesús Robles “sepa demasiado” y es mejor mantenerlo “bajo control”, pues en caso de estar “fuera” podría decidirse y abrir la boca, destapando lo que se antoja podría ser una enorme cloaca.