Nubia Ramos Carbajal, la “alcaldesa llorona”

POR: JORGE ARAGÓN

A medio año de gestión continúa lamentando las condiciones en que recibió el ayuntamiento de El Fuerte; no obstante, dice que “hasta hace milagros”      

Los lamentos y lloriqueos de la presidenta municipal de El Fuerte, Nubia Ramos Carbajal, parece que no tienen fin.

A medio año de su administración, continúa lamentándose, donde quiera que se pare y ante quien la quiera escuchar, sobre lo que califica como desastrosa situación económica en que sus antecesores dejaron las arcas municipales.

Es tan recurrente en sus lloriqueos, que no son pocos los que ahora “la tiran a lucas”, como reza la expresión coloquial.

“Lo que debe hacer la señora es ponerse a trabajar realmente y no echarle la culpa a otros del o que ahora a ella le corresponde hacer, trabajar por el bien de sus gobernados, que se encuentran sumidos en medio de gran cantidad de carencias por todos los rincones de este municipio”, han dicho los habitantes del alteño municipio.

Nubia Ramos por un lado llora porque dice que no le dejaron dinero pero, por otro, adquiere una lujosa unidad valorada en alrededor de un millón de pesos con las cuales recorre los poblados fortenses, claro, sin sufrir los estragos del calor, ya que es un vehículo con excelente sistema de aire acondicionado.

Sin embargo, esa percepción de ineptitud que hacia su persona tiene la gente la alcaldesa se la pasa por el arco del triunfo, pues en reciente visita a Los Mochis tuvo el descaro, atrevimiento o cinismo, de afirmar que hace milagros.

Asegura que sin tener lana ha logrado lo que sus antecesores no pudieron: mejorar las condiciones de vida de los fortenses.

Sin embargo, la realidad es otra. Basta con darse una vuelta por esos lugares para apreciar que en muchos lugares la lucha por sobrevivir es intensa, pues se encuentran olvidados por las autoridades.

Están en manos de Nubia Ramos, “la milagrosa quejumbrosa”.